Ritmo circadiano: el momento perfecto para restaurarlo y cuidar tu piel
No se trata solo de qué aplicas, sino de cuándo
Las funciones de la piel varían según la hora del día: sus células se sincronizan con el ritmo circadiano, un sistema natural que regula la renovación, la defensa y la reparación en ciclos de 24 horas.
Durante el día, la piel se defiende; por la noche, se repara. Comprender y respetar esos ritmos es la clave para cuidar tu piel de la mejor manera.
El concepto de skincare circadiano redefine la rutina de belleza moderna. Ya no se trata de acumular productos, sino de aplicarlos en el momento en que la piel está más receptiva para absorberlos y aprovecharlos.
El secreto de una piel que preserva su juventud visible no está solo en los activos que eliges, sino en el momento en que los usas.
La inteligencia del tiempo en la piel
Durante el día, la piel entra en modo defensa. Su energía se concentra en protegerse del estrés oxidativo, la radiación UV, la luz azul y la contaminación.
En este momento, los activos antioxidantes y protectores son más eficaces, pues refuerzan la función de barrera y limitan el daño ambiental.
Durante la noche, la piel se libera de las agresiones externas y enfoca toda su actividad en reparar, regenerar y reconstruir sus estructuras internas. El flujo sanguíneo aumenta, las enzimas reparadoras se activan y la renovación celular alcanza su máximo. Es el momento óptimo para los cuidados que impulsan la recuperación y la energía de la piel.
Sin embargo, la vida moderna —pantallas, estrés, falta de sueño— puede alterar este ritmo natural, afectando su capacidad de regeneración. Aquí es donde la ciencia circadiana del skincare cobra todo su sentido.
Biotecnología Patentada Age Proteom™: armonía entre ciencia y biología del tiempo
Age Proteom™ Sérum de Longevidad Celular es el primer suero diseñado para preservar el proteoma cutáneo, el conjunto de proteínas esenciales que sostienen la estructura, la luminosidad, la vitalidad de la piel, así como su densidad y firmeza.
Su innovación nace de la investigación de Laboratorios NAOS, en colaboración con el Prof. Miroslav Radman, pionero en biología del envejecimiento celular.
Inspirado en una bacteria extremófila capaz de sobrevivir en condiciones extremas, Age Proteom™ combina seis moléculas antioxidantes naturales llamadas bacterioruberinas, que actúan como chaperonas biomiméticas, que acompaña toda la formación de una proteína para que ésta sea de buena calidad y cumpla adecuadamente su función en la piel.
El resultado es una piel cuya velocidad de transformación visible se reduce a la mitad en solo 28 días*, con mejoras perceptibles en luminosidad, firmeza y uniformidad.
(*) Estudio clínico realizado en 55 voluntarios de entre 42 y 65 años, con signos visibles de fatiga y alteraciones pigmentarias leves. Aplicación dos veces al día (mañana y noche) durante 6 meses, bajo control dermatológico. Excelente tolerancia en el 100% de los participantes.


El reloj biológico de tu piel: cómo adaptar tu rutina a su ritmo natural
El éxito de Age Proteom™ se amplifica cuando se integra en una rutina alineada con los biorritmos naturales:


Por la mañana → defensa y energía
Aplica Age Proteom™ tras la limpieza y la bruma de Agua Celular para reforzar la barrera cutánea y aumentar la resistencia frente a la polución, la luz azul y el estrés ambiental.
Finaliza con tu protector solar habitual.
Por la noche → reparación y regeneración
Reaplica Age Proteom™ sobre la piel limpia antes de tu tratamiento nocturno. Durante el sueño, la piel entra en fase de reparación intensiva, y el sérum optimiza la restauración del proteoma dañado por las agresiones del día.
A continuación, aplica unas gotas de Excellageᴺᵀ Sleeping Oil para potenciar la nutrición, la firmeza y la sensación de confort. Su textura biomimética y su fragancia relajante el proceso de regeneración nocturna, dejando la piel más suave, elástica y luminosa al despertar.
Explora más sobre el papel del ritmo circadiano en la salud de tu piel en este artículo: Ciclo circadiano y salud de la piel
Cuando la ciencia del tiempo se une a la belleza
La longevidad de la piel no depende solo de los ingredientes, sino del momento biológico en que se aplican.
Al sincronizar tu rutina con el reloj interno de la piel, conviertes cada gesto en un acto de inteligencia y respeto por su ritmo natural.
Age Proteom™ no solo protege y repara: enseña a la piel a adaptarse al paso del tiempo, preservando su armonía, su energía y su vitalidad.
Descubre tu propio ritmo de belleza. La piel tiene su tiempo, y Age Proteom™ sabe escucharlo.

